Si deseas ser un ser humano bien formado, capaz de mantener una interlocución de distintos asuntos, tienes que ser una persona lectora. Y no es necesario que tu material de lectura tenga que ser de un asunto serio para que seas capaz de conseguir ciertas pinceladas de información que quizás sean bueno algún día. Nunca he conocido a una persona muy aficionada a la lectura que no sea una persona. Sin embargo si que me he encontrado con multitud personas aburrido/as que está claro que jamás abren un libros singulares. Además, cuanto mayor número de conocimientos poseas, mejor preparado estarás de cara a enfrentar muchos de los retos de la vida.
La lectura de libros singulares frecuentemente incrementa las aptitudes de escritura. Las personas que leen habitualmente, especialmente un libro bien escrito, obtienen diferentes estilos de escribir y tienen la facultad de conseguir un extraordinario estilo al escribir, por que se ven influenciados subconscientemente por él. Cuanto más practiques la lectura y cuanto mejor sea la calidad de lo que lees, más aumentará tu propia facultad de escritura.
Muchos libros plantean un enigma que propone un reto para que las personas lectoras lo solucionen, lo que beneficia de cara a fortalecer su capacidad de análisis. Es apasionante leer un enigma y el tratar de solucionarlo uno mismo. Incluso si no lo solucionas, has practicado tu pensamiento crítico y analítico de la forma más amena. Para seguir una trama tienes que recordar mucho y eso es una valiosa destreza para tu cerebro. Tienes que hacer memoria una serie de personajes, su vida pasada, acciones, papeles en la trama, así como las diversas subtramas que forman la historia. En definitiva, no comprenderás lo que lees si no memorizas ciertos datos mientras lees. Así que la lectura, mantiene en práctica la habilidad de memorización del cerebro.
Además de mitigar tus niveles generales de tensión, cabe la posibilidad de que el tema sobre lo que lees te proporcione una inmensa cantidad de apacibilidad y tranquilidad interna. Ha sido demostrado que la lectura de textos espirituales, por ejemplo, disminuye la presión arterial. Los libros de autoayuda pueden facilitar a las personas a lidiar con los trastornos del estado de ánimo. Sea cual sea el estado interior que busques alcanzar, es muy posible que exista un libros singulares que te ayude a lograrlo.
Es bueno estar al tanto de que tu hobby por los libros singulares va a tener muchas consecuencias a la larga, sobre todo si tienes hijos. Si la gente que te rodea lee, es más probable que tú también lo hagas. Puedes sacar provecho de este hecho leyendo habitualmente en voz alta a tus hijos en casa. Una nueva investigación de Scholastic asegura que leer en voz alta a los niños a lo largo de sus primeros años de escolarización les inspira a ser lectores habituales en la edad adulta. A su vez, hay más probabilidad de que impulsen a sus propios hijos a ser personas lectoras también.
La lectura de ficción nos aporta algunas ventajas increíbles para la salud: Te hace más abierto de mente. Cuando lees ficción, sigues la historia de protagonistas que son distintos a ti. La lectura acerca de sus luchas, sus inquietudes y sus logros te da la posibilidad de conectar con personas diferentes a tu persona y a tu cultura, dandote perspectiva para la comprensión y apreciando la validez de las personas de todos las clases. Los libros de ficción mejoran las relaciones: Este género de libros pueden considerarse como "simuladores de realidad". Cuando leemos libros de ficción, vemos cómo actores se desenvuelven en relaciones interpersonales díficiles. A continuación podemos aplicar estas enseñanzas a nuestra vida cotidiana, mejorándonos a nosotros mismos en el proceso.
La lectura de libros singulares, aunque se trate de una afición solitaria, suele llevar a la ampliación de tu círculo social con grupos de lectura y otros colectivos de discusión. Contar con un grupo de amigos de verdad es una forma crucial de prevenir el envejecimiento prematuro, la depresión o la muerte.
La lectura no es solo una forma fascinante de echar el rato, sino que la lectura diaria estimula a ejercitar la memoria y a desarrollar tus aptitudes de pensamiento crítico. Aunque eso es algo que todo el mundo sabe. Es por eso que hemos recopilado algunos acontecimientos relacionados con la lectura peculiares de los cuales apostamos que jamás has escuchado hablar.
El primer libro ejecutado con máquina de escribir fue "Las aventuras de Tom Sawyer". El artista Mark Twain debía tener bastante tinta y bastante paciencia. ¿Sabías que el presidente Theodore Roosevelt se leía un libro al día? ¡Esto sí que es amor por la lectura!
Tal y como ocurre en la Biblioteca de "Juego de Tronos", antiguamente, el valor de los libros singulares era tan alto, que las personas tenían que atar los libros a las estanterías. Era una fórmula para prevenir robos muy efectiva y se realizaba bastante en el medievo.
Nuestros ojos miran en diversas direcciones durante la lectura: Increíble, pero cierto. Al leer, cada uno de los ojos mira una letra distinta el 50% del tiempo. Además, las direcciones de visión se pueden cruzar y divergir. Si sacas un libros singulares en Noruega, el gobierno adquirirá mil ejemplares (1.500 si se trata de un libro infantil) y los entregará a las bibliotecas de el país entero.
Una secuela no autorizada de los libros de Harry Potter fue vendida en China: El libro consistía "El Hobbit", pero con los seudónimos cambiados a los actores de Harry Potter. El responsable del libro "Eragon", Christopher Paolini, empezó a redactar el libro a los catorce años. Se mantuvo en el top de los libros infantiles más solicitados del New York Times durante 121 semanas.
"Struwwelpeter" es un cuento alemán y realizado con el propósito de asustar a los más pequeños para que se porten adecuadamente. Por ejemplo, el libro tiene algunas historias como la de un niño que no quiere comer su sopa y se marchita y fallece, la de una niña que juega con cerillas y se quema hasta fallecer, además de la de dos chavales que se ríen de una persona de piel oscura y acaban sumergidos en tinta como aprendizaje. ¿Sabías que el escritor de "The Iron Giant", Ted Hughes, había hecho el libro para sus 2 hijos, con el propósito de ayudarles a superar la muerte por suicidio de su madre en mil novecientos sesenta y trés? Los sustantivos colectivos que usamos con la finalidad de referirnos a los animales (una manada de vacas, una manada de ciervos, etc.) proceden en la gran mayoría del Salterio de San Albano, publicado en mil cuatrocientos ochenta y seis.
Hay un libro de trescientas hojas nombrado "Gadsby" que fue escrito sin usar jamás la letra "e". El original es francés, sin embargo hay más de una docena de traducciones en diferentes idiomas; hechas por traductores que también se las arreglaron para hacerlas sin utilizar la letra más usada del abecedario. Un libro conocido como "Atlanta Nights" fue realizado por un grupo de autores de ciencia ficción con el propósito de que fuera deliberadamente terrible como prueba de los incompetentes criterios de la editorial "PublishAmerica". Venía con un capítulo que contaba con oraciones aleatorias hechas por PC además de 2 capítulos totalmente iguales en palabras. La editorial lo aceptó.
No hay duda de que la la lectura es algo primordial: inspira, educa, sirve para entretenerse y bastante más. Aunque, con el gran número de libros singulares que son publicados cada semana, ¿Cómo puede una persona lectora (en especial alguien que se está iniciando en la lectura) tomar la mejor decisión de cuál seleccionar? Esta pregunta se me plantea asiduamente, tanto por mi trabajo como bibliotecario como por ser yo mismo un gran lector. Entonces, ¿De qué manera se escoge lo que se va a leer?
Házte estas preguntas: ¿Con qué estoy luchando en la actualidad? ¿Existe algo nuevo que haya llamado mi atención últimamente? ¿Existe alguna faceta de mi vida que quiera mejorar en este instante? ¿Hay algún aspecto que me preocupa mucho? ¿Tengo algún objetivo por delante para el cual debo prepararme? Indaga un poco y busca libros que parezcan interesantes de esos temas. De este modo, solo leerás lo que necesitas, no lo que piensas que debes leer. Algo muy interesante también es prestar libros singulares a tus conocidos. Esto puede parecer absurdo e irrelevante, pero si le das a la gente libros que crees que les van a beneficiar, es posible que te devuelvan el favor en el momento en que conozcan algo que se adapte a tus gustos. Otras personas pueden percibirte de una forma diferente a la que tú te ves, así que tendrán otro punto de vista sobre lo que te puede agradar. Lo mismo sucede al recomendar libros singulares. Como escribo bastante de libros, recibo regularmente correos electrónicos que me sugieren cosas de cara a leer más adelante, lo que a menudo me avisa que existen libros que de otra manera no habría conseguido encontrar.
Consulta en Internet: En esta época de comunidades globales de Internet seleccionar el libro adecuado es cuestión de un clic. Gracias a Internet, puedes hallar un gran número de libros que coincidan con tus intereses. Por ejemplo, en nuestra web podrás encontrar cientos de libros singulares diferentes ya preseleccionados. Otro consejo muy bueno es pedir recomendaciones: Pide consejos a tu familia y colegas. Probablemente alguna persona de tu círculo pueda ser un aficionado a la literatura. Como tienen gustos similares, podrás fiarte de su opinión. Al conocer tu personalidad y tienen en cuenta tus aficiones, tendrán una buena idea de lo que te va a gustar. Yo por mi parte, lo hago constantemente. Por otra parte, si más de 1 persona te sugiere un libros singulares, ve a por él. Seguro que es bueno.
Asegúrate de que el libro es apropiado para la edad. Por descontado, siempre está bien coger un libro infantil de vez en cuando, únicamente por diversión. ¡Aunque aún así recuerda que que no importa lo que los otros piensen de ti, de tu estilo de libros o de lo que te encanta o quieres leer. Si quieres leerlo únicamente tienes que cogerlo y disfrutarlo.
De forma previa a que existieran los libros singulares, existían los cuentos. Contar relatos era un acto que se hacía en comunidad: la narración de la vida cotidiana con el propósito de transmitir un aprendizaje, inculcar valores o tan solo para entretener. Contar historias era una vía comunitaria de poder compartir la alegría, manteniendo alejada la oscuridad o el peligro. De esta manera es como nacieron los cuentos de hadas y de la manera en que el lenguaje y la palabra hablada encontraron su poder.
Los romanos y los griegos también fueron pioneros en fabricar las tablillas de cera, que eran laminas de madera recubiertos de cera, y que daban la posibilidad de escribir algo, quitarlo y reutilizarlo tantas veces como se desease. Se cree que el primer libro escrito en papel se creó en China. Se creó usando moras, cáñamo, corteza y hasta pescado para que se formase una gigantesca pulpa, que se podía prensar y secar con el objetivo de crear el papel. Cada hoja de papel tenía prácticamente la dimensión de un periódico y era llamado "hoja". En cuanto se imprimía la hoja con tinta utilizando bloques de impresión de madera, se conocía como "folio". ¡Ahora ya sabes el motivo por el qué en nuestra lengua también se le llama "folio" a las páginas de tus libros singulares favoritos!
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